martes, 24 de mayo de 2016

LOS MÓVILES.

LOS MÓVILES


   Quién nos iba a decir a nosotros hace treinta años, el cambio tan brusco y tan peligroso que iba a tener la sociedad mundial.
  Cuando en nuestras ciudades veíamos a alguien con un aparato llamándo por teléfono la mayoría de las veces nos sonreíamos ¡Porque hay que ver! ¡Que aparatos! Parecían ladrillos, de como eran de grandes al recordarlo en el tiempo piensa uno dónde los llevarían colgados sus usuarios para que no les molestaran. Esos mismos que lo llevaran en aquellos tiempos inmemorable se acordarán pensando no haber nacido en estas fechas, para no tener que ir atarragando de aquellos incómodos aparatos. Que si no hubiese sido por el servicio que prestaban la mayoría los hubiese dejado en sus respectivos domicilios o en el lugar de trabajo.
Cuando inventa cualquier utensilio, en la mayoría de los casos ¡Cuanto pesa el transportarlos! Y con el paso del tiempo lo van adaptando mejor a las necesidades, que se pretende hacer de su uso cotidiano.
Si los hubiesen dejado de la forma como se inventó seguro que no habría tantos usuarios, ¡Aunque les pesara a las empresas! De no tener tantos beneficios. ¿Pero cuantos accidentes no se hubieran producido?
A veces el ir paseando por cualquier ciudad o pueblo y no llevar un móvil, he ir chateando con él. ¡Es cómo si fuese uno un bicho raro! La comunicación entre nosotros se va perdiendo. Poco a poco a veces de forma brutal, cuando se sube uno en cualquier transporte público lo primero que cogemos, una vez sentados e incluso yendo de pié es nuestro juguete, para comunicarnos con los demás.
Nos metemos en nuestro caparazón y no nos importa para nada el mundo exterior, de esa forma se van degradando las sociedades. Aunque pensemos la mayoría de las veces que somos muy adelantados en nuestro tiempo es todo lo contrario.
Cuantas personas mayores no hay que no tenían hasta hace poco ni idea de lo que era “Chatear”, y ya no se pueden despegar del aparato, ¿Que pena pensar en lo que estamos haciendo? ¿Con nosotros mismos y con los que tenemos alrededor? Si dejarán de funcionar aunque fuese un día dichos aparatos, no quiero ni pensar hasta donde llegarían las manifestaciones de protesta de millones de usuarios. Ya que es una ola mundial lo que se ha producido, a raíz del uso que le damos a estos ¡Malditos aparatos! Las compañías que los suministran estarán más que satisfechas con esta reacción global, pero con el tiempo la gran mayoría se acordará y se lamentará de haber hecho un uso tan indebido durante tanto tiempo, sin necesidad por el sólo placer de querer ser cómo los demás, sin pensar para nada en su bienestar físico y mental.
Que bonito está ver una pareja. Con un móvil cada uno, dándose la espalda y seguramente diciéndose que se aman mucho.
Como podemos ser tan jili.....? Con lo bonito que resulta diciéndoselo cara a cara mirándose a los ojos, acaso se va a ir perdiendo esto tan importante, en la relación de una pareja ¡A consecuencia de los dichosos móviles! No seamos niños malcriados que si nos quitan el chupe empezamos a llorar.
El amor es una cosa muy seria y no se debe de jugar con él.

Francisco Domínguez.

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