El
Amor es un jardín de Rosas, de todos los colores, que hay que
cultivar; con mucha frecuencia para que no se marchiten nunca.
Debemos
hacer todo lo posible, todos los días, de nuestra vida, para que la
Llama no se apague . Debemos de hablarnos en cada momento, saber
comunicarnos, no solamente hablando, sino con gestos, caricias y todo
lo que nos apetezca, para hacer cada día más fuerte esa unión, que
se estableció, a consecuencia de nuestro entendimiento, y
complicidad que no debe romperse nunca, aunque en algunos momentos
alguien nos pueda poner trabas para que deje de ser Maravilloso.
Es
lo más Romántico que la vida nos ofrece, tengamos esto siempre
presente. En lo más hondo de nuestro Corazón. Hay que pensar, en la
suerte que tenemos; porque el Universo o alguien ha puesto en nuestro
camino algo tan hermoso y tan difícil en algunos casos de conseguir;
cuantos, o cuantas, darían lo que fuese, por estar en nuestra
situación, no hay bienes suficientes, que puedan pagar la
Felicidad, de dos personas que se quieren.
La
vida va cambiando y entre nosotros cada vez debe haber más fortaleza
y entendimiento para que no surjan nunca malas vibraciones, que
podían dar al traste con esa Relación tan bonita que en su momento
creamos y cultivamos, para satisfacción nuestra, y de las personas
que tenemos alrededor, que en la mayoría de los casos son el Espejo,
en el cual se miran.
Seamos
siempre consecuentes con nuestros sentimientos y pensamientos, y
hagamos de nuestra compresión y nuestro entendimiento nuestra
BANDERA.
Francisco
Domínguez.
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